jueves, 6 de octubre de 2011

DISCAPACIDAD DEL ALMA

No podemos nombrar  lo que vemos, lo que pasa, lo que sucede alrededor de una persona con discapacidad, sin un mínimo  de consenso es síntoma de que hay una situación que no que no está clara.

Discapacitado, incapacitado, rengo, con “capacidades diferentes”, da igual va mas allá del rotulo que le ponemos , se trata de la esencia del “ser”, en toda su dimensión. Esta gran variabilidad que somos los seres humanos que nos hace diferente unos de otos, altos, bajos, flacos, gordos, morochos, rubios… discapacitados, pero en esencia seres humanos.

El desafío es entender que la discapacidad  es nuestra, en un mundo capitalista, regido por el individualismo, que impone parámetros estándar de las personas mediante la televisión y medios gráficos. Demasiado ego nos ciega, sin dejarnos ver la realidad.

 No somos diferentes sino indiferentes, incapaces de ver la necesidad en el otro de sentirse parte de este mundo, que no es su discapacidad sino la de todos. Cuando comprendemos esto vamos a estar dando el primer paso.

 Saber que no se trata de rampas, ascensores, elementos de asistencia, leyes., etc,  conocemos a que nos referimos cuando hablamos  de esto, pero como  no nos toca de cerca seguimos en la “nuestra” o miramos hacia el costado. Me refiero a lo que se sentimos cuando  estamos frente  a un discapacitado,  incomodidad? Incertidumbre? Desgracia? Lastima?  o te ayuda a cruzar la calle para sentirme bien conmigo mismo y después … después estoy de nuevo en la mía.
Discapacidad del alma: es justamente eso, seguir en lo nuestro sin saber que lo nuestro es realidad es de todos, ellos también nos pertenecen.
 No hay dolor mas grande que el del alma, que el del alma que no la dejan ser, no nos están pidiendo que le demos una mano, que cedamos  el asiento en el colectivo, nos están pidiendo una sonrisa, nuestro tiempo, un espacio para sentirse vivos, enseñarnos algo.. tal vez recapacitar,  recapacitar el alma.!

                                                                                                  Licenciado Mauro Viglietti



No hay comentarios:

Publicar un comentario